Luke: I'll never join you!
Darth Vader: If you only knew the power of the Dark Side. Obi-Wan never told you what happened to your father.
Luke: He told me enough! He told me *you* killed him!
Darth Vader: No. *I* am your father.
Luke: No. No. That's not true. That's impossible!
Darth Vader: Search your feelings, you *know* it to be true!
Luke: [anguished] No! No!
No se preocupen, ni me he comido un pandebono pasado envuelto en papel absorbente de cocina ni me he equivocado de post, simplemente quise recordar este dialogo del Episodio V de la saga Star Wars, que tanto se ha adaptado en innumerables producciones y que no por nada hoy día contiene la frase más célebre de la historia del cine: “*I* am your father”.


En términos generales Gavin Hood, Director de esta película, logra un desarrollo ágil y dinámico que permite que en todo momento el espectador este atento sin perder el hilo argumental de la historia. El esfuerzo en penetrar en la estructura psicológica de Wolverine tiene recompensa al obtener un personaje coherente durante la historia y en relación al resto de las entregas X-Men. No obstante, a pesar de intentar compaginar de forma armoniosa con los trabajos de Bryan Singer, existen pequeñas incongruencias, tal es el caso del lazo fraternal entre Sabretooth (Victor Creed) y Wolverine. Es este punto el que considero fue el mayor pecado de Hood. Por el afán de querer sorprender y lograr profundizar en los terrenos de las relaciones entre Wolverine y Sabretooth (Leónidas, como lo conocimos en Colombia), Gavin Hood hizo una tortilla de seres y sucesos con la historia original; lo que dio como resultado algo que ya había mencionado en la crítica de la entrega anterior: Unos personajes sacados del cómic inmersos en una historia que no es la de los dibujos.
Para aquellos que somos seguidores del cómic, la producción de Gavin Hood muestra una versión no tan “blasfema” como la de Brett Ratner (X-Men: The Last Stand), pero bastante alejada de la realidad de la historieta.
En cuanto a los efectos visuales, creo que, teniendo en cuenta la altura de la producción, pudieron ser mejores. No me convenció la apariencia de los poderes de Gambito ni los cambios de época en la introducción.
Si bien ya es imposible solucionar lo de la falta de fidelidad a la historia original de la Marvel, solo queda esperar que próximas versiones de la franquicia sigan manteniendo la coherencia y la calidad que se merece. Si bien X-Men Origins: Wolverine, no ha sido la mejor película de superhéroes que se haya hecho, está muy lejos de ser la peor y abre el largo camino a un sinnúmero de opciones bastante lucrativas, es decir, hay X-Men para rato.
No deseo terminar sin decir que me pareció interesante y hasta gracioso cómo se matiza la historia con la intervención de un par de personajes que, de no haber sido por su final en la historia, hubiera jurado que eran Jonathan y Martha Kent…. Esto quiere decir que estaríamos ante un hermano putativo de Superman… que hasta la ropa de Clark heredó!!!!!

Calificación: 3.5 (En escala de 1 a 5).
RASOFF
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